miércoles, 13 de enero de 2010

es un despropósito muy grande. ¿quién, acaso, intentaría leer los periódicos sin leer ninguna mentira? ¿cómo escuchar shine on your crazy diamond sin sentirse vulgar?
no se trata de enfrentar ontologías hasta que el mundo se hunda, se trata más bien de afirmar lo que se da, efectivamente, no en el espacio, sino más bien es una cuestión telológica, hay que afirmar el fin del mundo, pero también la pregunta. las causas eficientes, formales y materiales siempre son las menos importantes, sin la final todo importa un carajo. y es lo único a rescatar de todo este gran sistema filosófico (que por mí podría irse a la puta que le parió), pero que sin embargo es lo que posibilita la hermenéutica (su ausencia, claro, sólo su ausencia la posibilita), que se dé o no se dé la causa final sólo condiciona mi vida, nunca la lectura de un texto, teleológicamente emma zunz seguirá siendo violada independientemente de la interpretación que se dé de dicho cuento. y yo seguiré como estoy, pero es importante saberlo.

1 comentario:

Rocío dijo...

hace un tiempo que no te leo ajeno.